La selección argentina se impuso por 2-0 a un entusiasta equipo de El Salvador en un partido amistoso donde la albiceleste, que está buscando la puesta a punto para la Copa América de este año en Chile, sufrió la ausencia de su astro, Lionel Messi.

Messi, que no estuvo por un golpe que recibió en su pie derecho jugando por el Barcelona, vio el partido desde el banco de suplentes mientras su nombre fue ruidosamente coreado varias veces por los casi 54.000 entusiastas espectadores.

"El primer día Messi entrenó bien, el segundo día sintió molestias y el tercer día no podía calzarse. Comprendo la ansiedad de la gente, pero él no podía. La gente lo quiere ver, pero físicamente no podía", dijo el técnico Gerardo Martino.

Argentina, que intentaba quebrar la férrea defensa salvadoreña, pudo doblegar esa resistencia con un gol en contra del defensor Néstor Renderos, tras el remate de Ever Banegas a los 54 minutos, y un tiro libre sobre el final del encuentro del mediocampista de Independiente, Federico Mancuello.

"Jugamos el partido que esperábamos jugar, había que tener paciencia, (...) íbamos a tener la pelota con pocos espacios, y la alternativa de la media distancia era válida en este tipo de partidos", expresó Martino.

"Tengo la idea que por nuestra forma de jugar y algunos rivales que vamos a tener que enfrentar van a presentarse estos tipos de partidos", agregó.