El legendario Estadio Maracaná es uno de los elegidos para acoger el Mundial 2014 y la Copa Confederaciones de este año en junio próximo y está siendo remodelado, pero los avances a esta altura del año no son los esperados.
Y es que el principal coliseo deportivo de Brasil no solamente está lejos de estar terminado, sino que durante esta semana quedó completamente inundado debido a un fuerte temporal que se hizo presente en Río de Janeiro.
Tanto es así que el césped parece una verdadera piscina -ver galería de fotos- y se logra advertir que falta mucho trabajo para que el recinto esté en óptimas condiciones de recibir los certámenes internacionales.
No obstante, el gobierno de Río de Janeiro le prometió al secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, que las obras serán entregadas el 27 de abril, tal como se había dispuesto inicialmente, más allá de los percances sufridos esta semana.
De hecho, los encargados de los trabajos dispusieron la incorporación al equipo de ocho alpinistas profesionales y 17 especialistas en altura para instalar la lona que cubrirá casi la totalidad de los asientos y así acelerar los plazos.
Cabe señalar que éstos no son los primeros problemas que tiene la organización en la remodelación del Maracaná, donde ya se han gastado 860 millones de euros, cuando la inversión inicial estaba presupuestada en 320.