Bochornoso. Cuando se jugaban 12 minutos del partido entre Cobresal y Corinthians por el Grupo 8 de la Copa Libertadores, el juego debió detenerse por una insólita razón: No había luz.
Las torres de iluminación del estadio El Cobre de El Salvador se apagaron y por largos 17 minutos los equipos y el público debieron esperar.
Finalmente se logró recuperar la electricidad y el partido se pudo reanudar. Eso sí, el primer tiempo finalmente duró más de 60 minutos.