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El lío político que puede dejar a Uruguay fuera del Mundial

Este lunes renunció el presidente y todo el Consejo Ejecutivo del fútbol charrúa, lo que sería investigado por la FIFA.

Daniel Andrade

Lunes 31 de marzo de 2014

Cuando queda poco más de dos meses para que comience el Mundial de Brasil 2014, la Selección Uruguaya está expuesta a la posibilidad a perder el boleto a la cita que consiguió de manera legítima dentro del campo de juego.

Esto porque la crisis institucional que vive el fútbol charrúa llegó a su nivel más alto este lunes, luego que el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Sebastián Bauzá, presentara su renuncia junto con todos los miembros del Consejo Ejecutivo de la entidad.

Los directivos tomaron la determinación luego de verse inmiscuidos en una crisis que se desató el pasado viernes, la cual estuvo influida por una decisión de José Mujica.

El presidente de Uruguay tomó la determinación que la policía dejara de colaborar con la seguridad en las canchas charrúas, luego de incidentes generados el jueves pasado en el encuentro que Nacional disputó con Newell's por Copa Libertadores.

La decisión del máximo mandatario del país oriental implica que el Estado solamente preste colaboración para resguardar las tribunas y boleterías, por lo que el resto de la seguridad deberá ser financiada de forma privada por los clubes.

Esto provocó suspensión de algunos encuentros durante el fin de semana por falta de efectivos y condiciones para que se lleven a cabo los partidos, lo que también generó suspicacias.

Nacional sospechaba que la postergación del cruce entre Miramar Misiones y Peñarol se realizó con el objetivo de favorecer al cuadro carbonero y darle más tiempo para preparar su pleito por Copa Libertadores, por lo que preparaba una declaración en contra de la directiva del fútbol uruguayo, la que dejó su cargo en masa durante este lunes.

La supuesta influencia de José Mujica en la renuncia masiva de la cabecera del balompié charrúa hace especular a los medios de dicho país con una posible sanción por parte de la FIFA.

El máximo ente del fútbol mundial suele reprender duramente las intervenciones de los gobiernos en las decisiones futbolísticas, por lo que, de demostrarse que el Presidente tuvo algo que ver en la salida de Bauzá y compañía, la sanción para la AUF puede ser la desafiliación al organismo, dejando fuera a la Selección de Brasil 2014.