Es sabida la pasión con la que se vive el fútbol en Argentina tanto dentro como fuera de la cancha, aunque lo ocurrido en un entrenamiento de Boca Juniors escapó de lo racional un poco más de lo habitual.
Y es que el joven Leandro Paredes, mediocampista del club, le hizo unos amagues de más al portero Agustín Orión durante la práctica de este domingo, lo que el experimentado arquero no le perdonó.
Como si hubiese pasado en una final de Copa Libertadores, el guardametas que suele ser llamado a la Selección Argentina arremetió con todo por detrás del volante, con claras intenciones de golpearlo.
Paredes, debido al tremendo golpe, debió abandonar el entrenamiento ayudado por compañeros, ya que finalmente cuenta con un esguince en su tobillo izquierdo, algo que, incluso, puede ser peor, según afirma la prensa trasandina.