Los problemas judiciales para Lionel Messi están lejos de llegar a su fin.
Esto luego que este lunes, el juez de Gavà (Cataluña, España) decidiera continuar con la imputación en su contra, a pesar de la petición de la Fiscalía de archivar la causa luego que el jugador pagara cinco millones de euros para saldar la deuda que mantenía con Hacienda, y por la que se lo acusa de delito fiscal tanto a él como a su padre.
De esta manera, el atacante del Fútbol Club Barcelona podría ser interrogado en calidad de imputado por tres presuntos delitos contra Hacienda, ocurridos entre 2007 y 2009 y que tienen relación con los derechos de imagen del jugador.
Pese a que Messi no está directamente implicado en la concreción y realización de los contratos cuestionados, el argumento del juez es que, aunque el futbolista no haya leído lo que estaba firmando "podría haber leído alguno de estos contratos aunque fuera en sus encabezamientos".
Esto implica, según la visión del juez, que de alguna manera estaría en conocimiento de la creación de empresas ficticias para poder así evadir impuestos, por lo que la investigación seguirá adelante.
Ante la imputación, ahora Messi deberá esperar que la Fiscalía solicite la apertura de un juicio oral en su contra o que la causa sea sobreseída, lo que ocurrirá dentro de los próximos diez días.