Los hinchas del Sunderland vivieron una de las jornadas más dolorosas de su vida al ver a su equipo humillado por el Southampton.
Jugando en condición de visita, un puñado de aficionados viajaron para ver cómo la escuadra de sus amores era vapuleado con un contundente 8-0.
Los jugadores entendieron el dolor de los fanáticos y este martes anunciaron un gesto a modo de "compensación" para aplacar, de alguna manera, el mal rato que les hicieron pasar.
El club anunció que el plantel ofreció devolver el valor de la entrada del pleito a todos los hinchas que viajaron para ver el partido en la cancha.
Si no quieren recibir el monto, dicha cantidad irá como donación a un hogar de niños que sufren enfermedades cuyas curas aún son desconocidas.
El capitán del equipo, John O'Shea, dijo que esta es una forma de "agradecer a los hinchas que viajaron un largo camino para darnos su respaldo y, pese a todo, estar con nosotros hasta el pitazo final".