La tensa calma que se vive entre Barcelona y la Real Sociedad para zanjar de una vez por todas el futuro del meta nacional Claudio Bravo, al parecer, tiene los días contados.
Desde el cuadro de San Sebastián informan que hasta el momento no ha llegado oferta formal alguna hasta sus oficinas, pero está convencidos que así será ya que los catalanes quieren abrochar la mayoría de sus fichajes antes que comience el Mundial.
Y, ante la inminente llegada de Bravo a cubrir el arco culé, se ha abierto una nueva fórmula: la llegada del delantero Bojan Krkic, ex Barcelona, que se desempeña en el Ajax.
De momento, según fuentes del club donostiarra consultadas por el Diario AS, el delantero catalán regresa de su cesión al Ajax de Amsterdam y no cuenta para el Barça, que le busca una salida a pesar de que Luis Enrique ya le tuvo en la Roma.
En la Real esta posibilidad “no disgusta”, indican, porque es un jugador bien considerado en la secretaría técnica.
Las cifras que se estarían barajando en la operación, a falta de esa primera oferta del Barca, rondarían entre 8 y 12 millones, los ocho que el Barça se ha puesto como límite, y los 12 que la Real considera mínimo para dejar salir a Bravo.