Hace unas semanas Luciano Cabral fue detenido por la policía argentina luego de que se le acusara de participar del asesinato de Joan Villegas, un joven de 27 años, en Mendoza. El jugador, que participó en el sudamericano Sub 20 de Uruguay 2015 con la Selección Chilena, aún espera la resolución de la investigación que realizan las autoridades trasandinas y no pierde la esperanza de salir libre.
En conversación con el diario La Tercera, desde la prisión el volante dio detalles de cómo son sus días como recluso. "Trato de no perder la fe y pensar en positivo, tratar de pensar en que todo saldrá bien", señaló.
El jugador, que al momento de ser detenido pertenecía a las filas de Atlético Paranaense de Brasil, cree que una vez terminado este episodio "sólo será parte de un mal recuerdo".
En la angustia del encierro, Cabral aseguró que lo más difícil ha sido no compartir con sus seres queridos: "No ver a mi papá. No poder estar con mi hija que apenas tiene algunos meses de vida. No poder disfrutarla como corresponde me tiene mal".
Sin embargo, y pese a que intenta ser positivo, el ex seleccionado Sub 20 cree que esta situación afectará su carrera irremediablemente: "Cualquier equipo no me abrirá las puertas".
"Va a ser difícil que un club o alguien te quiera después de todo esto. Eso también me asusta", agregó.
El mediocampista asegura ser inocente de lo que se le acusa haber hecho esa fatídica noche: "No me encontraba en el lugar ni hice nada de lo que se ha dicho...Sólo fui a buscar a mi papá y cuando lo encontré ya todo había sucedido", contó.
El abogado del futbolista indicó que la próxima semana podrían saber la respuesta sobre la apelación que busca sacarlo de la cárcel.