Click acá para ir directamente al contenido

Valdivia se confiesa

[VIDEO] El "Mago" habló de su continuidad, de cómo reconoció a su secuestrador y disparó contra quienes dudaron de él.

Alonso Sanchez

Jueves 14 de junio de 2012

Visiblemente afectado, Jorge Valdivia enfrentó a la prensa en Brasil. El volante creativo habló de todo; del secuestro, de su careo con su secuestrador y sobre las posibilidades de seguir vistiendo defendiendo los colores del "Verdão".

Consultado por la posibilidad de seguir en Palmeiras, Valdivia deslizó la posibilidad de que no continúa en Brasil. "Si me preguntas hoy si puedo seguir jugando en Palmeiras, la respuestas es no lo sé. No te puedo contestar esa pregunta. Para jugar al fútbol tienes que estar bien de la cabeza y hoy yo no lo estoy", aseguró.

"Quizás en un tiempo te pueda contestas, pero hoy no sé, hoy no sé nada. Ahora lo que tengo que hacer es levantarme y seguir hacia adelante", continuó.

Después de hablar durante largos minutos en portugués, el ex Colo Colo se dio el tiempo para contestar algunas preguntas en español. Al dominar el idioma, no se guardó nada.

"No probé nada con la detención, sólo dejé que la verdad estuviera por encima de las especulaciones de lo que la prensa en Chile habló. Los medios de farándula dudaron de la veracidad de los hechos. Espero que le pidan disculpas a Dios y no a mi porque jugar con algo tan terrible como con lo que yo viví no se hace", disparó.

"Sé muy bien que son personas que sólo buscan el mal de los otros y espero que tengan un momento de reflexión (...) Sé muy bien también que no puedo pedir nada más de ese tipo de personas. Su idea es vender y obviamente van a dudar. Son tan ridículos y tan estúpidos. Ahora se preguntan dónde estaba el arma con la que me amenazaron. Quien hace ese tipo de pregunta no tiene conciencia de lo que me pasó", prosiguió.

Sobre el careo que tuvo con su secuestrador, Valdivia comentó que "recién ayer pude reconocer a la persona que nos secuestró".

"Tuve que ir a reconocerlo. Él estaba detrás de un vidrio donde yo lo podía ver y él no me podía ver a mí. Fue difícil recordar todas esas horas de terror, fue muy fuerte", contestó afectado.

"(Ver al secuestrador) Fue difícil y complicado, porque se me vinieron muchos momentos de las casi tres horas que viví entre la vida y la muerte, me dio impotencia, me dieron ganas de hacer una estupidez. Es distinto cuando te apuntan con un arma y cuando no la tiene", comentó Valdivia con impotencia.

Ahora sólo el tiempo dirá si Jorge Valdivia podrá seguir jugando en el Palmeiras y aceptar la idea de estar lejos de su familia.