Después de la sangrienta riña entre el "Barti" y el "Huinca", llegó la división de los grupos que apoyan a "Pancho Malo" y al "Ruso".
Todo comenzó cuando una sangrienta riña entre el "Barti" y el "Huinca" marcó las disputas de poder al interior de una barra que dice ser "Brava". Luego de ese episodio el poder quedó en las manos de Francisco Muñoz o "Pancho Malo" y Jonathan Arenaldi "el Ruso", a principio de los de los 90'.
La barra brava del 'Cacique' en ese momento quedó compuesta sólo en Santiago por 72 "piños" o grupos, los que tomaron el control de la hinchada. Según testigos, estas agrupaciones no aceptaban la opinión de terceros o disidentes a quienes poco a poco terminaban apartándolos. En ese momento su rol era mantener lazos con la dirigencia.
Pero todo cambió tras la detención del "Ruso" por tráfico de drogas en 2010. Arenaldi le pidió ayuda a Muñoz y éste se negó a tenderle una mano.
Desde aquel día se fracciona la Garra Blanca. Francisco Muñoz asume el poder absoluto de la "Coordinación" y bajo su mandato comienza a "barrer" a los disidentes.
El panorama cambia en el Estadio Monumental, Muñoz y sus piños mantuvieron en el sector Arica: Puente Alto, La Grecia, San Bernardo y los Holocausto. Mientras que a los partidarios de Jonathan: Spectros y Suicidas (tras riñas y amenazas) se ubicaron en el codo opuesto, en el sector Galvarino.