Un desafío insólito. La escudería de la Fórmula 1, Red Bull, invitó a su piloto Daniel Ricciardo a poner a prueba el potente motor de su vehículo contra la fuerza de un equipo de rugby, los Bath de Inglaterra.
En definitiva fue poner a prueba una máquina con la más alta tecnología y capaz de superar los 300 kilómetros por hora frente a ocho potentes jugadores de ruggy. Revisa las imágenes.