Stanislas Wawrinka (8°) dio una de las grandes sorpresas del Abierto de Australia y eliminó a Novak Djokovic (2°) en un verdadero partidazo.
El suizo luchó por casi cuatro horas para superar al serbio por un marcador de 2-6, 6-4, 6-2, 3-6 y 9-7, clasificando a las semifinales del primer Grand Slam del año.
El primer set daba la impresión que el partido sería de trámite rápido a favor de Djokovic, llevándose la manga inicial con un contundente 6-2, producto de dos quiebres.
Pero tal como había ocurrido en los últimos cruces entre ambos, Wawrinka demostró que no sería fácil para el serbio y mostrando un nivel altísimo se llevó los dos siguientes sets, primero por 6-4 y luego por 6-2.
La cuarta manga fue dramática, con cada game peleado como si fuera el último, con Wawrinka dejando pasar oportunidades para cerrar el encuentro y Djokovic luchando hasta que pudo igualar el partido, cerrando el parcial por 6-3, luego de un quiebre en los games finales.
En el último set, y a pesar de lo que se podría haber pensado, Wawrinka se mantuvo fuerte mentalmente y jugó de igual a igual con el número dos del mundo, llevando la definición hasta el extremo, la que terminó con un triunfo para el helvético con un 9-7 en el parcial final.
El suizo cortó varias rachas con esta victoria, ya que, luego de doce derrotas consecutivas, pudo vencer a Djokovic, algo que no lograba desde el año 2006, cuando se impuso por un doble 6-3 en el ATP de Viena.
Además, dio fin a la marca de 25 triunfos consecutivos que tenía el serbio en Australia (ganó las últimas tres ediciones de este certamen) y las 28 victorias al hilo que éste acumulaba en el circuito ATP.
Ahora, Wawrinka se medirá en la semifinal del Abierto de Australia al checo Tomas Berdych (7°), quien viene de dejar en el camino a otro de los favoritos, el español David Ferrer (3°).