El ministro de Minería, Hernán de Solminihac, y el presidente ejecutivo de Codelco, Thomas Keller, presentaron esta mañana un estado de avance del proyecto Mina Subterránea Chuquicamata y adelantaron detalles de la tronadura programada en el yacimiento, que marcará el inicio de las operaciones subterráneas del tajo minero más grande del mundo.
El proyecto subterráneo presenta un estado de avance de unos 14 kilómetros de túneles, correspondientes a la fase de exploración del mineral. En comparación con el Metro de Santiago, equivale a una distancia entre las estaciones Las Rejas y Tobalaba. Hasta la fecha se han invertido cerca de US$876 millones y se espera que antes de fin de año se apruebe el proyecto completo.
"Chuquicamata se alista para una transformación total, que cambiará para siempre la cara de este yacimiento. La iniciativa se traducirá en el paso de cielo abierto a minería subterránea, que implicará un enorme desafío organizacional y cultural para la minera”, destacó de Solminihac.
La autoridad precisó que la tronadura programada dará paso a dos túneles paralelos de unos 9 kilómetros de largo, uno para el acceso y salida del personal en buses, y el otro para la correa de transporte de mineral, pista de servicios y vía alternativa para emergencias.
“Es un proyecto robusto desde todopunto de vista y también desde la perspectiva comercial”, señaló el presidenteejecutivo de la cuprífera, descartando que su ejecución se pueda ver afectada porlos vaivenes que se observan en el precio del cobre. “Codelco tiene una miradade largo plazo en su negocio y la calidad de este yacimiento lo hace rentableincluso en condiciones de mercado desfavorables”.
El año 2020 culminará la explotación del cobre como la conocemos actualmente en Chuquicamata, por lo que se espera que en su etapa de plenitud, el proyecto Mina Subterránea Chuquicamata, que comenzará sus operaciones en 2018, llegue en forma gradual a una producción de 450 mil toneladas de cobre fino.
