Las ventas minoristas de la región Metropolitana mostraron cifras azules y positivas en el primer bimestre de 2013 al crecer un 6,8%, impulsadas principalmente por la demanda interna.
Según detalló la Cámara Nacional de Comercio (CNC), en enero crecieron un 5,3%, mientras que febrero aceleró el ritmo a un 8,4%.
El dinamismo se explica por el consumo privado, motivado por el mayor poder adquisitivo de la población gracias a incremento en el empleo y remuneraciones junto a mejores condiciones crediticias.
La cifra de la primera parte del año es superior a la variación acumulada en 2012, de 6,0%.
Los rubros que destacaron en esta expansión fueron Vestuario y Calzado, con crecimientos de 20% y 30% respectivamente, influidas por las liquidaciones de temporada.
Al contrario, la división Línea Tradicional de Supermercado sigue contrayéndose, sobretodo por el alza en los precios de los alimentos.