"La verdad es que no entiendo por qué va a afectar en los precios, si en el fondo cuando a la gente se le pregunte si tiene una enfermedad preexistente, no se involucre al embarazo porque este es un proceso natural, temporal y que obedece a la naturaleza misma del ser humano".
Así replicó la ministra de Salud, Helia Molina, el rechazo de la Asociación de Isapres al anuncio del Gobierno de eliminar la preexistencia del embarazo al momento de ingresar a una isapre.
"Como Gobierno pensamos que si queremos avanzar hacia la equidad de género, tenemos que empezar a destrabar, descomprimir y a dejar que la gente piense que estar embarazada es una molestia para la sociedad, a los empresarios donde uno trabaja o es una molestia para los sistemas de salud", agregó.
La titular señaló en conversación con Canal 24 Horas que "no se esperaba" el rechazo de las Isapres, quienes a través de un comunicado explicaron que no descartan un "reconocimiento de los mayores costos" y que los "cambios de esta naturaleza deberían estar insertos en una reforma".
"En el fondo, lo único que estamos evitando es que se considere el embarazo como una preexistencia. No estamos limitando a las isapres de cómo trabajan con este en el plan de salud", agregó.
Molina hizo énfasis en que se busca terminar con la discriminación de las mujeres en el sistema privado al momento de estar embarazadas, así como también descartó que exista de las isapres una "mala intención de perjudicar a la gente si está embarazada", agregó.
"Estamos trabajando el tema de una ley donde se puedan regular los aspectos regulables, pero también son las personas las que tienen que decidir si están dispuestas a pagar lo que le ofrezcan", señaló.
"Me parece que para hacer negocios con el embarazo y reproducción humana, hay que cobrar los precios justos. No corresponde a lo que he oído y al aporte realizado por las isapres en el Consejo Presidencial de Isapres", agregó.