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Peligra trabajo de Abelardo

Anuncio de Romney de que recortará presupuesto de la televisión pública genera insólita respuesta en las redes sociales.

Mariángel Calderón

Jueves 4 de octubre de 2012

Abelardo, la gran ave amarilla de Plaza Sésamo está asustado y la razón es muy simple: Mitt Romney anunció en el debate presidencial de la Universidad de Denver que, de ser electo, recortaría el presupuesto de la cadena de televisión PBS, hogar del popular programa para niños.

Romney aclaró que "me encanta Abelardo (Big Bird para los estadounidenses)", pero no dudó en anunciar que para reducir el déficit presupuestario recortaría gastos innecesarios como la televisora pública, a la que, incluso, pertenece el moderador del evento, Jim Lehrer.

El anuncio molestó a miles de usuarios de la web, que crearon creativos carteles indicando lo que sucedería con Abelardo si Romney es electo para gobernar Estados Unidos.

 

La campaña fue parte de los más de 10 millones de tuits que se compartieron durante la primera discusión pública entre el candidato republicano y Barack Obama, lo que transformó a este debate en el evento político más tuiteado en la historia de EE.UU.

Según el blog de Twitter, los temas más comentados fueron el momento en que el moderador Jim Lehrer impidió que Mitt Romney iniciara otro tema de conversación, el episodio en que Obama dijo que le quedaban "cinco segundos más" y cuando la discusión versó sobre el plan de salud "Obamacare".

Los comentarios respecto a la imagen de Obama, que se mostró nervioso, poco claro y constantemente mirando el suelo, también fueron temas discutidos en la red social. La imagen del candidato siendo enfrentado por un Mitt Romney seguro y asertivo convencieron más a la audiencia, que dio como ganador al candidato republicano.

De acuerdo a una encuesta publicada por la CNN,  el ex gobernador de Masachussetts se impuso con 67% de las preferencias por sobre Obama, quien sólo obtuvo el 25% del favoritismo.

Un sondeo de la cadena CBS sostuvo que los votantes indecisos que vieron la discusión se inclinaron en un 46% en favor de Romney, mientras que el 22% optó por su rival. El 32% restante calificó el encuentro como un empate.

El enfrentamiento realizado este miércoles es el primer debate de tres encuentros que realizarán los candidato al sillón de la Casa Blanca.

Si hace algunas semanas estaba claro que el aspirante republicano llegaba al evento con la misión de dar vueltas las encuestas y mejorar su imagen, ahora es evidente que es el demócrata el que tendrá que recomponerse y remontar en el siguiente debate si no quiere sembrar dudas sobre su liderazgo.