La presidenta argentina, Cristina Fernández, seguía internada el miércoles con pronóstico estable en un hospital de Buenos Aires, tras haber ingresado el fin de semana con un cuadro febril infeccioso, informó el Gobierno en un comunicado.
La mandataria "cursa el tercer día de internación por un cuadro de sigmoiditis", dijo el parte médico con la firma de los doctores Marcelo Ballesteros y Daniel Fernández, de la unidad médica presidencial.
El texto agregó que, una vez que Fernández reciba el alta médica, deberá permanecer en reposo en la residencia presidencial por al menos diez días.
Fuentes oficiales consultadas dijeron no tener información acerca de cuándo la mandataria podría dejar el hospital.
"Se encuentra estable, cumpliendo tratamiento sintomático y con antibióticos por vía endovenosa. Continúa internada para completar (el) tratamiento, y con control evolutivo", señaló la nota.
La sigmoiditis es una inflamación o una infección de una parte del colon. Una fuente médica privada dijo que, de acuerdo con los partes oficiales, el problema de salud de la mandataria no reviste gravedad.
El secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, señaló que debido a su recuperación la presidenta argentina no podrá asistir a la cumbre del G-20 que se realizará el 15 y el 16 de noviembre en Australia, por lo que la reemplazará el ministro de Economía, Axel Kicillof.
A mediados de octubre, la presidenta -de 61 años- permaneció varios días en reposo por faringitis, mientras que un año atrás fue intervenida quirúrgicamente por un hematoma cerebral.
Fuente: Reuters