La política del hijo único en China suele ser objeto de duras críticas en todo el mundo, pero en general suele ser respetada por sus ciudadanos, por temor a las represalias del Estado.
Sin embargo, hay excepciones. Una pareja de Zhaoqing, ciudad al sur de China, que se atrevió a desafiar las leyes y tuvo 8 hijos por fecundación in vitro.
El caso salió a la luz pública luego de que una fotografía de las ocho guaguas se publicara en internet, y ahora se enfrentan a ser sancionados con una multa de entre 5 y 10 millones de yuanes (de 0,8 a 1,6 millones de dólares) para los padres.
La pareja habría tenido problemas para concebir hijos de forma natural, por lo que decidió recurrir a la fecundación in vitro en Hong Kong, invirtiendo un millón de yuanes (160.000 dólares) en el tratamiento.
El resultado fue una sorpresa, ya que tanto los embriones implantados en el vientre de la madre como en uno de "alquiler" fueron todos fecundados.
Cabe recordar, que la política de tener solo un hijo en China se instauró en 1970 con el objetivo de controlar la sobrepoblación.
En el caso de la provincia de Cantón, donde reside la pareja, se estipula que las familias que deseen tener más de un hijo deberán pagar hasta seis veces los ingresos del año anterior.
El debate ciudadano se ha instaurado producto del caso, debido a que las familias acaudaladas tendrían más posibilidades de no respetar la política del hijo único pagando lo exigido.
Según las estadísticas, la política ha logrado detener el crecimiento demográfico anual desde 1,35 millones de nuevos habitantes por año en 1980 a los 630.000 actuales.
El caso está siendo investigado, según el diario cantonés Southern Metropolis Daily.
Tras el debate, no se descarta flexibilizar la política en zonas más desarrolladas, para cubrir las necesidades del mercado laboral del país que cada día crecen.