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Ébola representa una doble amenaza para las mujeres embarazadas de África occidental

El temor a los hospitales, o el peligro a dar a la luz en casa, con el riesgo de contagio son algunos de los peligros a los que se enfrentan a diaro la smujeres embarazadas en los países donde hay brote de ébola.

24Horas.cl TVN

Sábado 15 de noviembre de 2014

Las mujeres embarazadas en África occidental viven bajo una doble amenaza frente al ébola: el temor a los hospitales, o el peligro a dar a la luz en casa, con el riesgo de contagio.

En el centro de la capital de Sierra Leona, Freetown, en el barrio "Magazine", desde donde se ven las miserables casuchas de Susan's Bay, el personal del dispensario de Mabella se lamenta el viernes en sus locales vacíos, frente a la mezquita.

"Las pacientes tienen miedo de nosotros. Ya no vienen, a menos de estar verdaderamente enfermos", dice su responsable, Justina Bangura, exhibiendo el gran registro amarillo donde están anotados los nombres de las parturientas.

"47 partos en julio, 30 en agosto, 25 en septiembre y 27 en octubre", dice.

Su equipo vio pasar el número de partos a domicilio de siete en julio, a 14 en agosto, y 10 en octubre. Sin ignorar que otras pudieron hacerlo sin que se sepa.

"Se trata de explicar a las mujeres que se arriesgan a la infección y a la muerte pariendo en casa. Pero nos llaman las ‘enfermeras ébola’. Entre julio y agosto decían que incluso se les inyectaba el virus. La gente nos insulta y nos lanzan piedras" informa con emoción Eugenia Bodkin.

"Incluso yo, al comienzo, tenía miedo de tocar los pacientes, de palparlos", dijo la enfermera. "Pero trato de convencerlos: estamos ahí para salvar vidas".

La mujer de unos 40 años llega al dispensario en traje normal y solo se coloca el uniforme en el consultorio.

Lejos del centro de la ciudad, en el barrio de Wellington, las enfermeras del dispensario de Kuntorloh encontraron una forma para evitar los prejuicios de sus pacientes: trabajan vestidas como en la calle y sin sus uniformes de enfermeras.

"Todos tienen miedo de ébola", dice Ramatu Kamara, en falda y turbante lila, pero con guantes plásticos, antes de vacunar a Anthony, de dos meses.

"Es la razón por la que ya no llevamos uniforme, de lo contrario las mujeres ya no vienen. Dicen que todas las enfermeras tienen, que se mueren y que les están mintiendo", explica.

RÉCORD DE MORTALIDAD EN LAS MADRES

Según el director, Musab Sillah, la situación se mejoró un poco después de los tres días de confinamiento impuesto por el gobierno a toda la población en septiembre, aprovechada por las agencias humanitarias como la UNICEF o la ONG británica Save the Children que apoya su dispensario, para hacer pedagogía puerta a puerta.

"Pero cuando el gobierno trata de sensibilizar a la población en reuniones públicas, eso no funciona para nada", afirmó.

En otros países como Liberia con frecuencia las estructuras sanitarias, desbordadas a causa de la epidemia, cierran sus puertas a las mujeres embarazadas.

Sierra Leona tiene la tasa de mortalidad natal más elevada del mundo, con 1.200 muertes por cada 100.000 nacimientos, tasa agravada aun más por el ébola.

El gobierno reaccionó sancionando los nacimientos a domicilio: 50.000 leones (11 dólares, 9 euros) de multa para las mujeres que violen la consigna. Pero aquí, añade el director, se atiende sin denunciar a las que buscan ayuda después de haber dado a luz.

Después de parir, en caso de sospecha de ébola, deben de inmediato cesar de amamantar a los bebés, dice Musab Sillah.

Según los cálculos del Fondo de las Naciones unidas para la población (FNUAP), 800.000 mujeres darán a luz en los próximos 12 meses en los tres países más afectados por ébola: Liberia, Sierra Leona y Guinea.

Fuente: AFP

Foto: AFP