Click acá para ir directamente al contenido

Escándalo en la iglesia polaca

Ritos de iniciación y grupos de sacerdotes homosexuales forman parte de los problemas que enfrenta.

Mariángel Calderón

Miércoles 26 de septiembre de 2012

Niños lamiendo las rodillas de un cura y religiosos abiertamente homosexuales son sólo una parte de las polémicas en las que se ha visto en vuelta en los últimos tiempos la Iglesia Católica en Polonia.

En los últimos tiempos se están conociendo detalles escabrosos de lo que ocurre puertas adentro en colegios, iglesias y seminarios.

Como por ejemplo, un cuestionable rito de iniciación es el que protagonizó un sacerdote de una escuela salesiana de la localidad de Lublin, donde obligan a los alumnos de primer año a lamer crema de las rodillas del director del colegio, quien está sentado con un bastón de madera en la mano.

Los alumnos, que tiene escrito en su frente la palabra "kot" (gato en polaco) deben recorrer la escuela gateando hasta donde legan al religioso que tiene crema sobre sus rodillas, luego deben lamerlas.

Pese a que las imágenes son chocantes, un artículo publicado por el diario español El Mundo reveló que la ceremonia de iniciación se lleva a cabo todos los años y nunca han recibido alguna queja. Los padres de los alumnos, incluso, habrían firmado una carta en apoyo a las chocantes prácticas realizadas en el colegio.

Además de esta inusual situación, esta semana la edición polaca de la revista Newsweek publicó un reportaje sobre la homosexualidad en la iglesia católica de ese país.

Con una portada que muestra a dos sacerdotes besándose apasionadamente, el medio reveló la vida oculta que llevan los religiosos gays que se juntan en foros semidiscretos en internet y discuten cómo lograr ascender en la jerarquía eclesiástica.

Un periodista que fingió ser homosexual y que se infiltró el grupo de religiosos homosexuales, pudo exponer la cruda realidad, como que los sacerdotes gays comparten datos de "novios discretos" con sus pares.

Nuevo golpe, en fin, para la ya deteriorada imagen de la Iglesia Católica en el mundo, golpeada cada cierto tiempo por nuevos casos de abusos sexuales a menores a pesar del constante anuncio de nuevas normas para acabar con esta lacra.