Una mujer identificada como Rosangela Almeida dos Santos fue enterrada en Riachão das Neves, Brasil, sin embargo el pasado viernes realizaron la exhumación de su cadáver y se encontraron con la peor noticia: la mujer fue sepultada viva y luchó durante once días para salir de la sepultura.
El fallecimiento de Almeida dos Santos fue atribuido por los médicos a un shock séptico tras dos paros cardíacos, posteriormente fue velada y enterrada en un cementerio de la localidad el pasado 29 de enero.
No obstante, el día viernes 9 de febrero, los familiares de la mujer realizaron la exhumación del cuerpo debido que fueron alertados por vecinos, quienes relataron que habían escuchado fuertes gritos desde la tumba. Al abrir el ataúd el cuerpo de Almeida todavía estaba caliente y tenía múltiples heridas en sus manos y en la frente, atribuidas a la desesperación en su intento de escape.
"Hasta los clavos del ataúd estaban flojos porque ella intentó quitar la tapa. Sus manos estaban lastimadas, como si ella hubiera estado luchando por escapar", reveló su madre al medio brasileño O Globo.
Por su parte, la asistente del hogar en donde vivía la fallecida, Natalia Silva, agregó que en un principio "pensaba que era una broma de los niños que viven jugando dentro del cementerio".
La policía brasileña ha iniciado una investigación del caso para esclarecer responsabilidades y dar un poco de alivio a la familia de la víctima, la cual se encuentra impactada por la horrible noticia sobre el fallecimiento de la mujer.