China está boquiabierta por unas
fotografías que muestran a seis personas en una candente fiesta en la
habitación de un hotel, al menos la parte de sus habitantes que tiene acceso a Internet. La razón de la sorpresa: se acusó que varios de los
participantes serían funcionarios de alto rango del Partido Comunista.
La
serie de imágenes, 181 en total, fueron difundidas la semana pasada por el
sitio de microblogging Sina Weibo y ahora están cruzando, escandalosamente, las
fronteras.
Las imágenes habrían sido tomadas en 2008 y muestran a los participantes, seis
hombres y dos mujeres, en ropa interior
o desnudos, juntos en una extraña pose formal.
Ninguno
se muestra tímido ante la cámara ni se esfuerza por ocultar su rostro.
Uno
de los participantes inicialmente fue identificado como Wang Minsheing, jefe
del Partido Comunista en la provincia china de Lujiang. Otro de los hombres, se
dijo, sería su segundo al mando de Wang.
Autoridades
de gobierno chino negaron que se trate de ellos, y dijeron que todo era obra de
rumores y "calumnias maliciosas".
El propio Wang dijo a Diario del Pueblo de China que creía que lo habían involucrado como venganza por un caso de corrupción investigado en su provincia.
Pero otros dos participantes de la fiesta
sí reconocieron ser los de la fotografía, y admitieron que tenían vínculos con
el Partido Comunista.
Uno es Wang Yu, secretario adjunto de la Liga de la Juventud Comunista en la Universidad
de Hefei, en Anhui. La otra persona es su esposa, una profesora de escuela.
Un funcionario de gobierno habría
reconocido al sitio que publicó las fotos que si bien los otros dos hombres no
eran Wang Minsheing y su segundo al mando, éstos sí conocían a Wang Yu.
Las
fiestas sexuales y el libertinaje son ilegales en China, que castiga estas
conductas con penas de cárcel.