Desde las primeras horas de este martes, más de cinco millones de israelíes con derecho a voto comienzan a visitar las urnas en esta jornada de elecciones parlamentarias en Israel, donde la lista del primer ministro Benjamin Netanyahu es favorita.
El Likud, que representa a Netanyahu, y el Beitenu se unieron para enfrentar los comicios donde podrían obtener entre 32 y 35 escaños del congreso, según han determinado los especialistas.
El Parlamento israelí o Knesset cuenta con 120 puestos parlamentarios y, hasta estas elecciones, 44 de ellos pertenecían al partido de Netanyahu, quien adelantó los comicios, que debían realizarse en octubre, para poder aprobar un presupuesto austero con el objetivo de frenar la crisis que se vive el país.
Durante los últimos años la tendencia religiosa ultranacionalista conservadora se ha apoderado del discurso político del país, por ello, los resultados de estas elecciones no significarían un avance el conflicto con Palestina.
Si la coalición formada por el Likud y el Beitenu logran la victoria electoral, Benjamin Netanyahu optaría a un tercer periodo al mando del país.
Los colegios electorales abrieron a las siete de la mañana, hora local, y cerrarán cerca a de las diez de la noche. Luego comenzarán a conocerse los primeros resultados.