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Los bancos provocan nueva tormenta en España

La UE vigila de cerca las medidas del Gobierno de Rajoy para sanear las instituciones financieras.

Mariángel Calderón

Martes 8 de mayo de 2012

Ya se está gestando la última gran tormenta económica en España: la de los bancos. La crisis de Bankia (antigua Caja Madrid) ha hecho saltar todas las alarmas y, bajo la atenta mirada de la Unión Europea, el Gobierno de Mariano Rajoy prepara un polémico plan para salvar a las entidades financieras en peligro.

Bankia es una caja de ahorros, algo así como un banco de gestión privada, pero con nombramientos dirigenciales políticos y responsabilidad social (obligada a invertir parte de su capital en obras sociales). La salida este lunes de su presidente, Rodrigo Rato, y las medidas que aprobará el Ejecutivo central están obligando a contener la respiración a una sociedad cada vez más pesimista por la marcha de una crisis que no parece tener fin.

Con sus acciones en la Bolsa por el suelo, Bankia sufre en esta jornada el caos posterior a la salida de su jefe máximo por supuestas presiones políticas del oficialismo, que calificó a Rato como una persona que no estaba haciendo lo suficiente para sustentar la solvencia de la entidad. Por eso, según medios españoles, el ministro de Economía, Luis de Guindos, le pidió que diera un paso al costado.

Mientras el que fuera director del Fondo Monetario Internacional (FMI) y ex ministro de Economía del gobierno de José María Aznar, aseguró al diario ABC que "el Ejecutivo ha decidido que lo mejor es que yo no siga en Bankia", el Ministerio de Economía negó la intervención. "Lo que se ha producido es el anuncio del inminente cambio en la presidencia de la entidad", afirmó el gabinete del ministro De Guindos.

Con lo anterior, anunciaron también que el nuevo objetivo de la entidad será "ejecutar un plan de saneamiento, reestructuración y mejora del gobierno corporativo que garantice su viabilidad futura". Según fuentes no oficiales, el gobierno de Rajoy tiene planeado inyectar más de 6.000 millones de euros para sanear a la institución financiera. Indicaron además que el gobierno "apoyará a la entidad en todo lo que sea necesario para el cumplimiento de estos objetivos".

Esta decisión ha sido criticada por la oposición, que asegura que el gobierno no puede "desentenderse" de la entidad. El secretario general del opositor PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, explicó a un medio local que "lo mas importante quién la paga (la intervención); creo que ese es el dato que nos falta por conocer en este caso". Sin embargo, hizo un llamado a la calma y aseguro que "los ciudadanos pueden tener la tranquilidad de que no hay un solo euro que van a perder en este proceso de transformación del sistema financiero que es necesario".

La situación con Rato al frente de Bankia es especialmente complicada, ya que es considerado como el padre del "milagro económico español" en los años 90 al frente de la política económica del Partido Popular(PP), la misma tienda política que gobierna en la actualidad España. En su momento, Rato disputó con Rajoy ser el continuador de la obra de Aznar. Ganó el segundo, mientras que el primero se fue al FMI. La versión oficial es que Rato ha dimitido para que sus rivales no usen como argumento su histórica filiación "popular" en la operación de salvamento de Bankia, en una crisis que ha vuelto a dejar al descubierto los riesgos que tienen los nombramientos políticos en este tipo de instituciones,