Un nuevo tiroteo, esta vez durante una fiesta en una vivienda en el barrio de Scarborrough, Toronto, Canadá, culminó con dos personas fallecidas y 21 personas heridas, tras una confusa balacera.
La fiesta de la que participaban unas cien personas, terminó bruscamente, luego que participantes se enfrascaran en una discusión que terminó a tiros y que dejó a un hombre de 23 años y a una adolescente de 14 años como las víctimas fatales.
Además, la policía ha informado que entre los heridos se encontraría una menor de 12 años y otra de 16.
Este es el segundo tiroteo mortal en menos de dos meses en Toronto.
El jefe de policía de Toronto, Bill Blair, se comprometió a intensificar la presencia policial en el lugar y dijo que "estamos muy preocupados, no sólo con la resolución rápida y la solución de este crimen, también con el potencial de violencia vengativa".
En tanto, el alcalde de Toronto, Rob Ford dijo en un comunicado que,"estoy sorprendido y disgustado por este acto de violencia sin sentido".
La policía investiga la posible participación de pandillas en el hecho. Canadá tiene leyes muy estrictas para controlar el uso de armas de fuego y el crimen violento suele ser poco frecuente.