Con poca publicidad y de manera sencilla, como siempre vivió.
Así se conoció este martes la muerte en Madrid del escritor José Luis Sampedro, quien fuera un símbolo del movimiento social de los indignados en el país ibérico.
El autor del célebre libro "La sonrisa etrusca" pereció el domingo a los 96 años en su casa de la capital española. La noticias no se conoció, sin embargo, hasta este martes por expreso deseo del escritor, que quería morir sin que su fallecimiento fuera de conocimiento público.
"Nos dijo que quería beberse un Campari, así que le hicimos un granizado de Campari. Me miró y me dijo: 'Ahora empiezo a sentirme mejor. Muchas gracias a todos'. Se durmió y al cabo de un rato se murió", señaló su viuda, Olga Lucas, al diario El Mundo.
Humanista, economista y escritor, José Luis Sampedro fue un vocero de la lucha de los derechos sociales.
En los momentos, en que la crisis económica en España comenzaba a calar hondo en los españoles, Sampedro escribió el prólogo de la edición española del famoso libro "Indignaos" del francés Stéphane Hessel, recientemente fallecido igualmente.
En sus obra, promovió, además una economía "más humana, más solidaria, capaz de contribuir a desarrollar la dignidad de los pueblos", según publica El Mundo.
Además de su vida académica, en su novela más famosa, "La sonrisa etrusca", Sampedro pudo exponer su visión del amor, la familia y la vejez.