Mubarak Bala, un joven nigeriano, lleva más de una semana ingresado forzosamente en el hospital psiquiátrico Aminu Kano. Allí llegó el pasado viernes 13 de junio. ¿Su enfermedad? Declararse ateo.
Bala fue detenido por las autoridades en Nigeria bajo el argumento de que es un ateo, según denunció su abogado.
A través del correo electrónico y de Twitter, gracias a un celular oculto, el propio Mubarak Bala fue capaz de denunciar su ingreso forzoso a este recinto médico.
La organizazión International Humanist and Ethical Union (IHEU) ha lanzado una petición a escala global para presionar a las autoridades de Nigeria. Temen por bienestar de este joven y denuncian la violación de los derechos humanos que su detención representa.
Bala, de 29 años, asegura que las autoridades justificaron la decisión de detenerlo por su "cambio de personalidad", que le había hecho declararse ateo, tras ser sido criado en una familia musulmana.
Después de que un médico descartara que sufriera problemas psiquiátricos, la familia de Mubarak se inventó declaraciones delirantes, como que decía que "era gobernador".
Su propio hermano defendió su ingreso en el psiquiátrico alegando que todos los ateos que conocía habían tenido "una enfermedad mental en algún momento de su vida".
La sharia rige en esa zona de Nigeria, donde muchas personas son presionadas por su entorno debido a sus creencias o por otras razones religiosas que afectan "al honor" de su familia.