El comandante de las tropas de la OTAN en Afganistán (ISAF), John Allen, pidió perdón por la operación que dejó un saldo de 18 civiles muertos producto de un ataque aéreo. El ataque se produjo en la zona de Sajawand, en la periferia del distrito de Baraki Barak.
El comandante aseguró que al minuto de realizar el bombardeo: "No vimos a los civiles. Cuando la fuerza se acercó al edificio, fue atacada. Algunos militares, y esto era una operación conjunta entre Afganistán y Estados Unidos, atacaron y lanzaron una granada de mano. Tres de nuestros hombres resultaron heridos".
Allen declaró que están investigando los procedimientos utilizados y el número de personas fallecidas y resultaron heridas. "Ofrecí hoy mis disculpas al pueblo afgano y al gobernador, y les aseguré que vamos a investigar todo esto a fondo" sentenció.
El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, aseguró que entre los civiles muertos se cuentan a mujeres y niños que se encontraban celebrando una boda en la provincia de Loga. El mandatario quien se encuentra de gira en China, anunció que adelantará su regreso al país.
La muerte de civiles inocentes, sólo consiguió aumentar el rechazo de los afganos a las operaciones de tropas extranjeras comandadas por la OTAN.