El Papa Francisco viajará a Africa, donde pretende reunirse con habitantes de suburbios y refugiados y llamará al diálogo entre cristianos y musulmanes cuando visite Kenia, Uganda y la República de Centroafricana el próximo mes, dijo este sábado el Vaticano.
El viaje, el primero que realiza Francisco a África, está cargado de preocupaciones sobre la seguridad y el Papa pasará cerca de dos días en cada país y sólo visitará las capitales.
Desde su elección como el primer pontífice latinoamericano, Francisco se ha reunido con los más necesitados en los diez viajes que ha realizado al extranjero. En Nairobi, visitará Kangemi, un suburbio que alberga a unas 650.000 personas.
También sostendrá una reunión interreligiosa y ofrecerá una misa en una universidad en la capital.
La visita a Kenia fue puesta en duda en el planeamiento inicial del viaje que será entre el 25 y el 30 de noviembre.
El centro comercial Westgate de Nairobi fue escenario de cuatro días de asedio en septiembre del 2013 que dejó al menos 67 muertos en un ataque de hombres armados del grupo islamista al Shabaab con sede en Somalia.
En abril, militantes armados irrumpieron en el campus universitario de Garissa en el este de Kenia, dejando 148 muertos, la mayoría de ellos cristianos.
En Uganda, Francisco visitará un hogar de discapacitados en Nalukolongo, un suburbio de la capital Kampala.
La última parada en Bangui, capital de la República Centroafricana, donde el eje central de su visita a un país plagado por la violencia intercomunal será una reunión con líderes musulmanes en la mezquita de Koudoukou.
La violencia estalló en Bangui en septiembre tras el asesinato de un joven musulmán y la muerte de 77 personas. Gran parte de la violencia en la capital ha sido alentada por una milicia conocida como antibalaka, en su mayoría cristiana, y un grupo mayormente musulmán llamado Seleka.
Miles han muerto y centenas de miles han sido desplazados internamente desde que Seleka tomo el poder brevemente en el país de mayoría cristiana en el 2013. Más tarde entregaron el poder a un gobierno interino pero todavía controlan partes del norte del país.