Por un error de cálculo, casi se vieron comprometidas las vidas de cientos de personas en el aire del continente africano. Y fue "casi" por la brusca, pero necesaria maniobra del piloto de un avión de Air Seychelles, que se desvió de otro de Emirates y salvó a 892 personas.
Según publicó Daily Mail, otros medios internacionales y un registro del sitio web Flight Radar, el capitán italiano Roberto Vallicelli, piloto de un Airbus A330 de la pequeña Air Seychelles se vio repentina y literalmente en ruta frontal con un Airbus A380 de la compañía emiratí, el mayor vehículo de aviación comercial del mundo.
El complejo escenario habría ocurrido por un error de comunicación entre la tripulación del avión emiratí y torres de control, según describió la página especializada The Aviation Herald, pues el equipo de pilotos habría entregado una información imprecisa de altitud del aparato.
Y, como se puede constatar en el registro de Flight Radar, que exhibe rutas de vuelo en tiempo real a lo largo del mundo, ambos aviones iban en vía de colisión.
Afortunadamente, se disparó un alarma justo a tiempo para que el avión de la compañía de Seychelles, pequeño país de África, se moviera rápidamente hacia su derecha en el cielo de las islas Mauricio. Y así, se evitó una histórica tragedia aérea.