La estatua gigante de Mandela en Pretoria tiene un conejo en la oreja derecha. ¿Cómo llegó hasta ahí?
La figura fue colocada por los artistas André Prinsloo y Ruhan Janse van Vuuren, escultores que colocaron este pequeño animal a modo de firma, ya que el Ministerio de Cultura de Sudáfrica les prohibió firmar su obra. Ahora, tal y como explicaron al diario sudafricano Beeld, han pedido disculpas por dejar en la oreja del fallecido mandatario este polémico animal.
La gigantesca estatua, de 9 metros de altura, representa a un Nelson Mandela sonriente con los brazos abiertos. Fue inaugurada el pasado 16 de diciembre en los jardines de Union Buildings, la sede de la presidencia sudafricana en Pretoria, justo un día después del entierro del héroe de la lucha contra el "apartheid".
Tras descubrir el conejo, el gobierno sudafricano ordenó a los escultores que "restauren la integridad" de la estatua gigante del ex presidente.
Según los escultores, el conejo representa el poco tiempo que tuvieron para acabar la obra porque en lengua afrikáans la palabra "haas" quiere decir "conejo" pero también "prisa".
"El tiempo fue un gran factor, y hubo momentos en que tuvimos que trabajar muy duro", afirmó Prinsloo, que agregó en su descargo que, para verlo, "se necesitan binoculares".
"No podemos decir cuánto tiempo tardaremos en retirar el conejo. Estamos discutiéndolo con los responsables del Ministerio y la empresa encargada de fabricar la estatua", dijo el ministro de Cultura, que calificó de "desafortunado" que los escultores no comunicaran el añadido del detalle al gobierno.