Una mujer que denunció haber sido violada, fue sometida hoya un aborto no punible, es decir, que no merece castigo. La intervención serealizó este jueves en la ciudad de La Plata, al sur oeste de Buenos Aires,distante unos 60 kilómetros. La operación se realizó en el hospital San Martinde La Plata.
La mujer, cuya identidad se mantuvo en secreto, reconoció practicarel comercio sexual, sumando más antecedentes a la polémica generada por laaplicación de la medida.
El aborto se realizó posterior a la autorización que debehacer la Corte Suprema argentina, que es finalmente quien decide si esnecesaria o no la practicar la operación. En un principio, los doctores del centro médico se negaronrotundamente a realizarle a la mujer la operación, a lo que debió intervenir elMinisterio de salud de la provincia de la capital trasandina.
Fue el máximo tribunal de Justicia quien comunicó la medidaa las autoridades de la ciudad de Buenos Aires, a respetar el fallo judicial yrealizar la autorizada intervención.
"En el servicio de ginecología delhospital, como en otros Servicios, hay objetores de conciencia, pero todos loshospitales saben que hay que cumplir con el protocolo establecido para estoscasos", dijo el director de hospitales del Ministerio de Salud provincial,Claudio Ortiz.
La operación se concretó en medio de la polémicapor la negación, por parte de tribunales, a otra mujer que también había denunciadohaber sido víctima de violación. Dicha medida fue dejada sin efecto la noche deeste jueves.
El código penal argentino autoriza losabortos en caso de peligro de la vida o la salud de la mujer, violación yabusos a mujeres discapacitadas, aunque el artículo permite diversas interpretacionesentre los jueces para aplicar la ley.
En Argentina se practican más de 500 milabortos anuales, según cifras oficiales.