Era una decisión vital para Kiev: debía llegar este lunes a un acuerdo con Moscú para poder cancelar los casi US$2.000 millones de deuda por el gas que le suministraba Gazprom, bajo la amenaza de un eventual corte de suministro, hecho lo que finalmente sucedió.
Según detalla RT.com, ya que ambas partes no llegaron a acuerdo, la gigante energética rusa confirmó el congelamiento del envío de este insumo a Ucrania, como respuesta a lo que calificaron como unos impagos 'crónicos'.
La medida, de acuerdo a la publicación, significa que Kiev sólo recibirá el combustible por el que paguen.
De la misma forma, Gazprom aseguró que llevará el caso hasta el Tribunal de Arbitraje de Estocolmo, instancia en donde buscará asegurar el pago de lo adeudado.
A pesar de esta decisión, desde la empresa rusa aseguraron que los suministros de gas a otro países del continente no se verán afectados, a pesar de que múltiples redes de gaseoductos cruzan suelo ucraniano.
Por su parte, BBC Mundo detalla que en las negociaciones, Rusia le ofreció a Ucrania un descuento. Sin embargo, los representantes ucranianos pidieron la fijación de un nuevo precio por contrato, lo que habría trabado las conversaciones.
Foto: Reuters.