El primer ministro japonés, Shinzo Abe, condenó este miércoles el lanzamiento de un misil balístico norcoreano al mar de Japón y consideró que representa "una amenaza seria para la seguridad del país".
"Es un acto escandaloso que no se puede tolerar", declaró Abe a la prensa.
El ministro de Defensa, Gen Nakatani, indicó poco antes que el misil cayó en el mar de Japón, en la zona económica exclusiva (ZEE) del archipiélago, algo que no sucedía desde 1998.
Entonces, un misil norcoreano aterrizó en la ZEE del país que se situaba en el océano Pacífico después de sobrevolar el territorio.
"No se produjeron señales de alerta, es un gesto extremadamente problemático y peligroso desde el punto de vista de la seguridad de los aviones y barcos", subrayó el portavoz del Gobierno, Yoshihide Suga. "Hemos protestado inmediatamente ante Corea del Norte", dijo.
Japón había expresado en un libro blanco publicado el martes sus inquietudes por el programa nuclear norcoreano y estimaba posible que Pyongyang haya conseguido, como afirma, "miniaturizar cargas nucleares y desarrollar cabezas nucleares".