Tres matanzas en nueve días. Estos macabros números demuestran el panorama que se vive en México en plena etapa de campaña presidencial, donde los cinco candidatos deben enfrentar a sus rivales más duros: el crimen organizado y el narcotráfico.
Desde el 2006 que el presidente Felipe Calderón aumenta los fondos para luchar contra la violencia, pero el problema es la corrupción dentro de la policía. Ahora son los militares los encargados de hacer frente al problema que mantiene atemorizada a gran parte de la población mexicana.