El general director de Carabineros, Bruno Villalobos, confirmó que a 15 subió el número de uniformados involucrados en el millonario fraude revelado, cuyo perjuicio se elevaría a los $8 mil millones.
La autoridad entregó dicha información en el marco de la Sesión Especial de Seguridad Ciudadana a la cual fue invitado por parlamentarios de diversas coaliciones, para obtener mayores antecedentes del caso.
Pese a la cifra entregada, Villalobos no descartó la aparición de un número mayor de funcionarios involucrados a medida que vaya avanzando la investigación.
El directivo aclaró que, si bien el escándalo fue descubierto a comienzos de este años, "el último traspaso (de dineros a cuentas particulares) se produjo en noviembre de 2015".
En ese punto remarcó que "ningún cuartel o vehículo se dejaron de adquirir por el fraude", ya que los montos estaban destinados a remuneraciones.
Villalobos enfatizó en la carencia de mecanismos de control al interior de Carabineros, recordando que el fraude sólo pudo ser revelado a una instancia ejecutada por Hacienda. Por ello, anunció la creación de una unidad especial de análisis que fiscalice los gastos de funcionarios.