Una familia de Calama denunció los graves daños cerebrales con los que resultó en 2014 el pequeño Gonzalo Calderón, quien a sus cuatro años de edad sufrió las consecuencias luego de someterse a una cirugía dental, en el Hospital Carlos Cisternas de Calama.
Sandra Guarda, madre del menor, calificó la actual situación de "dolorosa, porque antes mi hijo podía caminar de forma normal y ahora está en silla de ruedas".
Desde el recinto comunicaron que están realizando un sumario interno, el cual sólo ha dejado una amonestación en la hoja de vida de profesional a cargo del procedimiento, mientras no exista un resultado definitivo.
Además, este último se mantiene en sus quehaceres mientras no se delimite de manera oficial si el daño en el niño fue producto de una negligencia.
La investigación permitirá dilucidar si Gonzalo Calderón recibió una dosis mayor de anestesia o si fue víctima de algún procedimiento inadecuado.