El Ministerio de Relaciones exteriores emitió un comunicado respecto a la liberación de los dos carabineros detenidos en Bolivia luego que este viernes traspasaran la frontera con la nación vecina, rechazando la comparación hecha por el presidente Evo Morales de este suceso con el procesamiento de los nueve ciudadanos bolivianos en territorio nacional.
De acuerdo al escrito, el Gobierno enfatizó que "no resulta comparable este caso con el anterior, porque en aquella oportunidad se siguió un debido proceso tras una acusación de un representante del Ministerio Público por graves delitos -aplicando los más altos estándares de prueba ante un tribunal independiente- y se concluyó con una sentencia judicial".
Además, Chile pidió no usar hechos similares para "fines propagandísticos" ni "movilizar a la opinión pública a través de actos de provocación y declaraciones destempladas resultan contraproducente con la aplicación de las normas del derecho y con el fomento de una adecuada vecindad".
La Cancillería nacional sostuvo que, en este contexto, "el cese de la hostilidad del Gobierno de Bolivia hacia el pueblo chileno y sus autoridades" sería una solución para concretar acuerdos diplomáticos y fronterizos entre ambos estados.
Las autoridades nacionales invitaron a sus pares altiplánicos a desarrollar las "bases técnicas" para así dar pie a acuerdos entre las naciones "para implementar plenamente el acuerdo vigente sobre controles integrados en el paso Chungará-Tambo Quemado, considerando la inauguración del nuevo complejo aduanero de Chungará construido por Chile para mejorar el libre tránsito entre ambos países".
