En diciembre del 2013, los dueños de la constructora y el ingeniero calculista fueron declarados culpables por el colapso del edificio Alto Río de Concepción, ocurrido la madrugada del 27 de febrero del 2010, acabando con la vida de 8 personas y dejando 7 heridos, tras la determinación las defensas interpusieron un recursos de nulidad.
Este viernes la Sala Penal de la Corte Suprema, en un fallo dividido, resolvieron cerrar el caso por el desplome del edificio y ratificar las condenas contra Juan Ignacio Ortigosa, Felipe Parra, Ricardo Baeza (dueños de la empresa constructora Socovil e inmobiliaria Río Huequén) y el ingeniero calculista René Pettinelli.
Los inculpados deberán cumplir las condenas en calidad de autores, de ocho cuasidelitos de homicidio, un cuasidelito de lesiones graves gravísimas, y seis cuasidelitos de lesiones simplemente graves.
De esta forma Ortigosa, Barra y Baeza deberán cumplir tres años de presidio remitido y el pago de 1.852 millones de pesos de indemnización, pago que también deberá efectuar Pettinelli, pero quien recibió 800 días de prisión.
El fiscal Regional, Julio Contardo explicó que la determinación llega a corroborar su convicción de que que siempre se tuvo de que los hechos eran constitutivos de delitos. "Esta fue la convicción que desde un principio tuvimos de seguir adelante con esta causa, de ejercer la acción penal pública, de confirmar las pruebas que nosotros teníamos en un inicio, del desarrollo de un trabajo en equipo colaborativo que implica un esfuerzo tremendo".