La Tercera Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago acogió dos diligencias solicitadas por el abogado Roberto Celedón, quien representa a Paola Papi, la madre del pequeño Rodrigo Anfruns Papi.
Esto a raíz de los peritajes practicados al cuerpo del pequeño que estuvo desaparecido 11 días en julio de 1979 y cuyos resultados son contradictorios.
Uno de éstos fue realizado por el Departamento de Medicina Legal de la Universidad de Chile en 2011 y concluyó que el niño no tenía más de tres días de fallecido cuando fue hallado, descartando que haya sido víctima de tortura desde la fecha que desapareció.
Tras esto, y a petición Consejo de Defensa del Estado (CDE), se decretó al exhumación de los restos, consignó radio Cooperativa.
Con estos antecedentes, el ministro en visita del caso, Manuel Antonio Valderrama, ordenó nuevos informes. Uno quedó el manos del Servicio Médical Legal (SML) que no pudo determinar la causas de muerte; otro de la tanatóloga Leonor Moyano concluyó que el menor no tenía más de 24 horas de fallecido cuando fue encontrado, mientars que el último a la doctora Laura Borgel quien afrmó que el niño estuvo agonizando cinco días en el mismo lugar donde fue encontrado tras 11 días de búsqueda.
La defensa de Papi cirticó esta última pericia, agregando que los responsables pueden ser encontrados entre los funcionarios de la Policía de Investigaciones (PDI) de aquella época.
"El niño fue secuestrado y asesinado por agentes del Estado", dijo Celedón.
De esta forma, se contradice la versión oficial del caso señala que el entonces menor de 16 años, Patricio Pincheira Villalobos, es el culpable del homicidio que conmovió al país.
En 2004, además, el ex carabinero José Rodríguez Márquez aseguró que personal de la Central Nacional de Informaciones (CNI) había participado del secuestro y posterior muerte del niño.