Si bien las inundaciones y aluviones ya pasaron, el norte de nuestro país sigue sintiendo los efectos de las precipitaciones que le afectaron a fines de marzo.
Algunos de ellos tienen relación con la situación sanitaria y algunas plagas que pueden verse potenciadas por el desorden propio de la situación.
Por esto el Ministerio de Salud entregó una serie de recomendaciones para evitar que moscas y roedores se vean beneficiados por el desastre natural que tomó lugar en esas zonas.
Lo más importante es mantener la vivienda y sus alrededores limpias, preocupándose de no acumular desperdicios o basura.
En el caso de los roedores es importante eliminar toda fuente de atracción (alimentos y agua), por lo que deben ser eliminados de su alcance tanto dentro de la vivienda, como en el patio.
Las moscas, en tanto, ponen sus huevos en elementos orgánicos, por lo que hay que tener especial cuidado con dejar la basura en recipientes cerrados para no atraerlas.
Las personas que viven en zonas que fueron afectadas deben almacenar el agua en recipientes con tapa sellada.
Ese mismo tipo de resguardo se debe tomar con la comida de mascotas o animales.
La presencia de ratones se puede determinar por avistamiento, ruidos, roeduras y fecas. Sólo es útil utilizar raticidas químicos cuando ya se han efectuado las medidas de aseo y saneamiento de la vivienda.