La Comisión de Evaluación Ambiental de la región de O'Higgins decretó la clausura definitiva de la planta de desechos orgánicos Colhue, ubicada en el Fundo San Luis, en la localidad de Pelequén.
En el mes de abril la entidad paralizó la planta de tratamiento de lodos con el objetivo de que la compañía pudiera solucionar los problemas de malos olores y presencia de moscas. Hechos que provocaron fuertes protestas por parte de los vecinos de Pelequén.
El seremi de Salud, Michael Casson, señaló que "en base a los antecedentes recabados en las fiscalizaciones y ante la inexistencia de un plan de cierre se tomó la determinación de la revocación de la resolución de calificación ambiental".
La autoridad explicó que la planta no podrá volver a operar y se le exigirá presentar un plan de cierre y abandono para recuperar la calidad ambiental del sector.