Quedan apenas un par de meses para que la Academia Nacional de Bomberos (ANB) inaugure un nuevo centro de entrenamiento. Será el segundo del país y se ubicará en la localidad de La Tirana, en la región de Tarapacá.
Centro de entrenamiento La Tirana
Centro de entrenamiento La Tirana
Las instalaciones no estarán terminadas al 100% cuando abra sus puertas, pero "ya se podrán usar las tres zonas de simulación, las salas de clase, los dormitorios...", explica el director de la ANB, Alonso Segeur. Pero hay otra sede más prevista, al sur, en Llanquihue, que se abrirá dentro de dos años.
Centro entrenamiento Sur
Centro entrenamiento Sur
Para la creación de estos dos nuevos centros, la Junta Nacional ha destinado casi $15.000 millones. La formación es uno de sus principales objetivos; de hecho, el desafío de los bomberos, según Miguel Reyes, presidente de la Junta Nacional, es "especializarse" para afrontar mejor "la variada gama de emergencias".
Actualmente, cualquier bombero o aspirante puede cursar los módulos de la parte inicial y operativa en su región, siendo "la misma formación" en todas, explica el director de la ANB, para que no suceda como en otros países como Estados Unidos, "donde hay diferencias entre las escuelas".
Sin embargo, en el nivel profesional, donde ya hay prácticas con fuego, hay que desplazarse al centro de entrenamiento de la capital, aunque la academia costea desde el traslado y alojamiento hasta el material requerido en el taller. "El bombero pone el tiempo, lo más valioso", considera Segeur.
"Un curso profesional para 24 bomberos de la región de Magallanes nos cuesta 8 millones de pesos", explica el director de la ANB; de ahí que invertir en los otros nuevos centros sea una forma de reducir costos, "pero también se debe a un tema de capacidad", insiste Alonso Segeur. "Este año hicimos un esfuerzo para que pasaran unas 5.000 personas, pero necesitamos capacidad para 30.000", explica.
Existe un interés por parte de los mismos bomberos. Al año, 14.000 personas asisten a alguno de los 1.800 cursos que se imparten en todo el territorio. La media es de dos talleres por personas, de manera que entregan 30.000 certificados.
MODELO ÚNICO EN EL MUNDO
El sistema chileno es "único en el mundo", dice el director de la ANB. Y no porque sean voluntarios, pues también los hay en otros países. La fortaleza radica en que solo existe una escuela única, con una formación a módulos, donde cada profesional no remunerado puede elegir los cursos que quiere tomar en cada momento. Está hecha a medida para el pueblo chileno.
No existe, tampoco, una carrera de bombero propiamente dicha, por lo que los operativos no van asumiendo cargos con respecto a los años de servicio, sino que son elecciones democráticas. Esto obliga a la academia a "masificar los cursos", dice Segeur. "Si una formación solo está diseñada para capitanes, tenemos que ofrecerla a todo el mundo, porque puede que el año que viene llegue alguien al cargo" al que le ha estado restringido el curso cuando se ofreció.
AUMENTO DEL FINANCIAMIENTO
El presupuesto de la Academia Nacional de Bomberos se duplicó este año, quedando en $957 millones. También se incrementaron los recursos que el Estado destinó a la instiución en general, hasta los $18.000 millones.
"Con la Presidenta (Michelle) Bachelet hemos conseguido un incremento del 10% que partió este año y al final de su mandato (el presupuesto) habrá aumentado hasta el 40%", explica el director de la Junta Nacional, Miguel Reyes.
La institución actúa como bisagra entre las 1.112 compañías y 30 brigadas especiales y los organismos oficiales, como Onemi y el Estado, con los que asegura que hay una buena comunicación.
Los recursos del Estado cubren en promedio el 55% de los gastos operacionales de los 311 cuerpos de bomberos del país. El ideal es llegar al 100% de las necesidades, pero insisten en mantener su independencia y en seguir combatiendo las emergencias sin remuneración, porque esta "es una profesión que nace del corazón", dice Reyes.
Quizás sea ese espíritu de compromiso y solidaridad lo que los convierte en la institución mejor valorada del país. Una entrega voluntaria que siguen cumpliendo con la misma dedicación y energía con la que nacieron en Valparaíso un 30 de junio de hace 164 años. Una admirable labor por la que sólo nos queda añadir: Gracias.
Feliz #DíaNacionaldelBombero