13 escolares chilenos -provenientes de establecimientos municipales- se prepararon durante más de un año para ser parte de un proyecto de innovación científica que les permitiera participar de un concurso en Estados Unidos.

Finalmente, el pasado 24 de septiembre los alumnos viajaron hacia Boston, en donde expusieron antes más de 200 equipos provenientes de todo el mundo.

Gracias a la ayuda monetaria entregada por la Corfo, las instalaciones prestadas por la Universidad Mayor y la dedicación de los jóvenes -quienes además tuvieron que sacrificar vacaciones-, los estudiantes lograron una meritoria medalla de bronce en la Competencia Mundial de Ciencia en los EE.UU.

Una pulsera que capta los rayos UV, spray que localiza silicio en las minas y una píldora para celiacos que degraden gluten, desató la alegría de los implicados, quienes se mostraron orgullosos del objetivo, pero también deslizaron una crítica a cómo se trata el tema en el país.

"Fue gratificante para nosotros, porque además fuimos el primer colegio municipalizado de Latinoamérica", manifestó Carolina Gatica, una de las participantes.

Sin embargo, "falta espacio hacia la gente para la ciencia, ya que no es algo que se dé a conocer", sentenció otra representante nacional, Belén Carrasco.