Para el próximo lunes 10 de julio está prevista la llegada a nuestro país del llamado "bus de la libertad", un vehículo que algunos califican como "el bus del odio". Esta máquina ha pasado ya por varios países como Estados Unidos, España y México. Pertenece a una ONG española que se llama CitizenGo, y entrega mensajes contrarios a la llamada "ideología de género" en menores de edad.
Su pronta circulación en las calles de Santiago y Valparaíso ha levantado una gran controversia entre grupos conservadores y los que defienden la libertad sexual. El Gobierno no quiso quedar exento a la discusión, y por medio de la vocera Paula Narváez fijó su posición al respecto: "Entendemos también que existe la libertad para expresar distintas opiniones en una sociedad democrática. El llamado que hacemos es a que este tipo de actividades no promueva el odio, la intolerancia, el irrespeto a las demás personas y a la diversidad".
Hoy la ministra @paulanarvaezo se refirió a llegada del "Bus de la Libertad" e hizo llamado a no promover el odio https://t.co/ckq8XEwTTF pic.twitter.com/td9c0DX71y
— Segegob (@segegob) 5 de julio de 2017
ANUNCIAN "BUS DE LA DIVERSIDAD"
El bus se movilizará con mensajes como "dejen a los niños en paz", Organizaciones como el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) e Iguales rechazan que este vehículo circule en Chile, e incluso preparan un bus de respuesta llamado "bus de la diversidad".
Es así como el presidente del Movilh, Rolando Jiménez, manifestó que como organización "hemos llamado a los alcaldes de la Región Metropolitana y de la Quinta Región a repudiar el recorrido de este bus, y la incitación al odio y a la violencia que hacen campañas como esta.
Por su parte Juan Enrique Pi, presidente de Iguales, sostuvo que al interior de la entidad "nos llama profundamente la atención la venida de este bus. Es un bus que envía un mensaje de exclusión a los niños y niñas adolescentes LGBT".
En una vereda distinta se encuentra la directora del Observatorio OLC (Observatorio Un Paso al Frente Chile), Marcela Aranda, quien explicó que "nosotros hoy estamos apelando a una imposición ideológica donde están limitando nuestras libertades constitucionales. El bus a Chile no viene con las consignas que estuvieron en España, sino que viene a levantar y empoderar a los papás de Chile, a comunicarles que hoy hay una política estructurada e ideológica que quiere vulnerar sus derechos".
En tanto, otro punto expone la organización Voces Católicas, desde donde uno de sus directivos, Alejandro Álvarez, se mostró contrario a este tipo de iniciativas ya que "aquí hay un tema muy importante que hay que traerlo a la palestra y que es las "ideologías de género". Esto busca siempre imponer una verdad a nadie, y nosotros no buscamos imponer nada a nadie. No compartimos la manera que tiene esta organzación de comunicar".