Enzo Fernández vivió un calvario por culpa de Facebook.
Fue acusado de robarle ocho millones de pesos a una mujer a la salida de un banco en San Fernando, pero las pruebas sólo eran parecerse al ladrón en su foto de perfil de la red social.
La asaltada buscó la patente del auto de la personas que la asaltó y, luego de buscar en Facebook a la dueña del vehículo, encontró en sus amigos a alguien que se parecía al ladrón. Lo que gatilló que Fernández fuera acusado del robo.
Eso le causó a Enzo ser detenido y pasar cinco días en la cárcel, además de ser catalogado como "un peligro para la sociedad".
Ahora que la pena de cárcel fue revertida, la causa sigue en investigación, pero Enzo aún tiene que probar que no fue quien realizó el asalto.