Han pasado 14 años de las tradicionales imágenes de Jorge Matute Johns que han acompañado el acontecer noticioso de los chilenos. Una muerte que continúa siendo todo un enigma. Con el nombramiento de una nueva ministra en visita surgen nuevas tesis.
Dos ex investigadores del caso; el ex comisario Héctor Arenas, y el mayor (r) Andrés Ovalle, reconocieron en exclusiva a 24 Horas que hubo “errores” y que la verdad está “en los primeros interrogatorios” a los que fueron sometidos los protagonistas de aquélla noche.
Según Arenas la noche en que Matute desapareció el yerno del ministro Jaime Solís, Farid Harun, llegó a la discoteca “La Cucaracha” con los siete procesados y, al salir en su auto, fue testigo de la golpiza que recibió el joven.
“Centra la atención de la investigación en un punto que soluciona el caso. Él menciona a la persona que agredió a una persona que, hasta ahora se desconoce la identidad, pero correspondería a Jorge Matute Johns”, cuenta Héctor Arenas.
Una hipótesis totalmente contraria es la que expone el ex mayor de Carabineros, Andrés Ovalle, quien asegura que a Matute lo agredió uno de los guardias de la discoteca y que después hubo un plan para esconder el cuerpo.
“Se puede comprobar en algunas hojas donde dice claramente cómo lo golpearon y quién lo golpeó. Marco Antonio González Espinoza dice claramente 'el guardia le dio un combo al Coke, quien cayó al suelo, y una niña rubia estaba en la escalera principal del acceso a la disco que gritaba 'no le peguen al Coke'”, cuenta.
¿Por qué el caso lleva 14 años sin solución?
“Mucha información no sirve para nada y fue descartada. Y estas tuvieron que ser indagadas y la investigación se fue para cualquier lado”, dice Arenas.
“Lo que se trata de proteger es lo que estaba ocurriendo en esa discoteca, porque una investigación que se realizara esa misma noche en “La Cucaracha” dejaba al descubierto el tráfico de drogas, la red de protección policial por parte de Carabineros y la clientela VIP que tenía el traficante de drogas”, dice Ovalle.