Este martes, y con la asistencia de la Presidenta Michelle Bachelet y autoridades científicas, se colocó un nuevo sismógrafo de carácter permanente que tiene como fin estudiar el comportamiento de la Falla de San Ramón.
La zona, ubicada en el oriente del área metropolitana, fue descubierta hace sólo 15 años por parte de la comunidad de expertos, iniciando paulatinamente una serie de investigaciones sobre sus características y peligros hacia la comunidad.
Por ello es que la instalación del sismógrafo fue catalogado como un avance, ya que la falla pasa por al menos seis comunas de Santiago: Vitacura, Las Condes, La Reina, Peñalolén, La Florida y Puente Alto, con el alto nivel demográfico que implica.
Gabriel Vargas, geólogo de la Universidad de Chile, explicó que "Santiago no se ha desarrollado de una forma que tome en cuenta la falla, queremos que la ciudad avance en base a una forma más sostenible".
Por su parte, el director del Centro Sismológico Nacional, Sergio Barrientos, detalló que con el adelanto existe la "esperanza de reconocer la tasa de actividad sísmica de la falla, para lo cual es necesario colocar estaciones sismológicas cerca de la misma".
Detallar que el sistema no predice los terremotos, pero sí podrá entregar mayor información para estar más preparados ante una emergencia.