Este miércoles, la fiscalía de Cauquenes cerrará la investigación por la muerte en septiembre de 2013 de Hernán Canales, quien fue atropellado por Martín Larraín, el hijo del presidente de Renovación Nacional (RN), Carlos Larraín.
Si bien la fiscalía tiene un plazo de diez días para presentar la acusación y realizar la audiencia de preparación de juicio oral, trascendidos señalan que la entidad buscará condenarlo por manejo en estado de ebriedad con resultado de muerte.
A esta acusación se sumará la de homicidio simple que pretende sumar al proceso el abogado querellante, Gonzalo Bulnes, según consigna el portal Terra.
"Haya habido mucha o poca posibilidad de sobrevivencia (de Hernán Canales), cuando Martín Larraín se fuga de lugar luego de media hora, lo que hace es privar a Hernán de toda posibilidad de vida", explicó el abogado.
Bulnes agregó que en la posta de Curanipe había una moderna ambulancia, la que hubiese servido para atender a la víctima y estabilizarla mientras era llevada al Hospital de Chanco.
Este probable cambio en formalización ha sido criticado por la defensa de Larraín, que hasta ahora enfrenta cargos por cuasidelito de homicidio, manejo en estado de ebriedad, no auxiliar a la víctima ni avisar a la autoridad.
"Los antecedentes recogidos en la investigación no sustentan por ninguna parte la teoría que ha planteado la parte querellante", dijo el abogado de Martín Larraín, Rodrigo Ávila.
En cuanto a Sebastián Edwards y Sofía Gaete -amigos de Larraín y acusados de obstrucción a la investigación-, podrían ser beneficiados por un acuerdo reparatorio o salida alternativa.